Cuando tu familia te da dinero para comprar tu apartamento

Muchos padres tienen el deseo y el poder adquisitivo para ayudar a sus hijos o nietos, para comprar una propiedad. Sin embargo, y dependiendo de la situación particular de cada uno, es bueno aceptar la ayuda o no. 

Invertir en un apartamento es una decisión que muchos tienen la ilusión de hacer, sobre todo si se trata de dos personas que se acaban de unir en pareja y planean hacer crecer la familia.

Ante la falta de dinero disponible para hacer un abono inicial o pagar una letra mensual, muchas personas recurren a pedir un préstamo de dinero a familiares, para poder comprar una propiedad, acorde a sus deseos y exigencias.

Si bien es cierto que obtener dinero de esta forma puede ser rápido y fácil, tiene tanto inconvenientes como ventajas. Veamos sobre ambos.

Ventajas de pedir dinero prestado a familiares

Por el cariño y la confianza, no habrá presiones por pagos. Esto quiere decir que, a diferencia de una entidad bancaria, un familiar no estará detrás si aún no puedes pagarle lo que ha te ha prestado ni tampoco estará pidiendo adelantos.

La familia, por regla general, desea que sus seres queridos tengan éxito y sienten el deseo o la motivación de ayudar en todas las etapas de la vida y sus procesos, a diferencia de un banco o un prestamista que solo esta motivado por su propio interés y beneficio económico.

No hay que pagar intereses. Los familiares prestan dinero como un favor personal y no para sacar provecho de ello, sobre todo en momentos como esos que no se cuenta con flujo económico.

No existen condiciones o comprobación de historial crediticio.

Desventajas de deberle a un familiar

La relación familiar puede verse afectada. Si bien es cierto ambas partes aceptaron el compromiso, tanto de dar el dinero como de recibirlo y regresarlo en un periodo de tiempo establecido, los temas que involucran dinero a veces no son predecibles y se puede perder el trabajo o tener problemas de salud grandes, lo que hará imposible el cumplimiento del pago.

Pueden utilizar el préstamo como medio de manipulación, sobre todo si se trata de un préstamo realizado entre padres e hijos.

Aparecen conflictos entre pareja. Lidiar con este tipo de situaciones con familia política puede resultar un poco complicado ya que existe un sentimiento de incomodidad con ellos y además, presiona a la pareja a pagar cuanto antes el dinero, lo que genera mucho estrés entre ellos.

Si tienes la necesidad de pedir dinero prestado a un familiar para comprar su apartamento, hágalo partícipe de la inversión, por ejemplo, ofreciéndole acciones sobre el inmueble. Esto puede sonar comprometedor, sin embargo, en caso que no puedas pagarles el dinero que le han prestado, al menos la otra parte cuenta con un beneficio tangible y que aumentará de valor en el tiempo.

Recuerda no hacer falsas promesas solo por conseguir dinero si lo necesitas, sobre todo si quien te va a prestar el dinero, es alguien importante en tu vida.

Piensa en las consecuencias a largo plazo de tus propias decisiones. En especial, no pidas prestado si sabes que no podrás devolverlo ni a corto ni a mediano plazo.

En tal caso se sincero y pídelo como regalo o donativo. Tus familiares y amigos posiblemente te ayuden de todas formas, y preferirán conocer la verdad a sentirse engañados.