¿En busca del primer apartamento?

 

Comprar tu primer apartamento se traduce en una emoción muy grande. Y es que la nueva adquisición se convertirá en tu primer hogar y el lugar en donde, con mucho esfuerzo y dedicación, tus metas se irán haciendo una realidad.

 

Te presentamos los errores más comunes que podrías cometer en este proceso y la guía con consideraciones importantes a tener en cuenta para ayudarte a no cometerlos.

 

  1. Hacer un mal presupuesto.

Lo primero que se nos viene a la mente cuando queremos comprar una propiedad es si la entidad bancaria nos va a prestar el dinero. Esto es importante, sin embargo, contar con un presupuesto previamente detallado, tomando en consideración todo lo que conlleva, como salario disponible y pagos o responsabilidades mensuales ya adquiridas, es fundamental.

Este paso es sumamente importante sobre todo para aquellos primeros compradores, que, por lo general, no cuentan con experiencia previa del costo de mantener un hogar. Una vez tenemos esto claro, procedemos a una entidad financiera para conseguir la pre-aprobación de un préstamo hipotecario, quienes nos confirmarán o no, si contamos con las condiciones para tenerlo y así poder comprar.

Por último, no olvides agregar en el presupuesto gastos extra involucrados tales como impuestos de terreno, de bienes inmuebles, cuota de mantenimiento del edificio y gastos en trámites legales, no en todos los casos el banco o la entidad financiera los asume.

 

  1. No estar seguro de la zona donde quieres comprar.

Antes de comprar tu apartamento, debes analizar minuciosamente las zonas que más te gusten para allí habitar. Para ello, te recomendamos hacer visitas en distintas horas del día de aquellas que más te llaman la atención y observar aspectos tales como la seguridad y los servicios disponibles que tendrás tales como supermercados, comercios, transporte, escuelas, clínicas, hospitales y espacios de sana recreación. Si es posible, habla con personas alrededor de la zona, donde podría estar tu futuro apartamento. Esto te ayudará a conocer detalles del área que sólo quienes habiten en ella saben; la idea no es solo conocer las virtudes de la zona sino las cosas que te podrían incomodar en un lugar que en otros no.

Esto no quiere decir que por temas desfavorables tengas que cambiar de zona, a veces son cosas de menor importancia que se pueden manejar, lo importante es estar informado previamente y prepararse para ello.

 

  1. No incluir el amoblado

Llegó el gran día y después de mucho ahorro y esfuerzo ¡me entregaron mi apartamento nuevo! Lo primero que se nos viene a la mente es la mudanza. Pensamos en el acarreo para llevar nuestros artículos personales, como ropa y zapatos, pero al llegar, nos percatamos que no tenemos nada para podernos mudar. Equipar un apartamento supone un importante desembolso y es un tema que debe ser pensado una vez nos aprueban el préstamo hipotecario y a la vez que ahorramos para el abono inicial, lo debemos hacer para amoblar. El primer consejo para evitar ser impulsivos o desesperarnos al ver todo vacío, es pensar en lo más importante, tener las conexiones básicas como luz, agua y gas; y en mobiliario, escoger dónde vamos a dormir.

La cama es un mueble esencial porque allí es donde descansaremos de nuestra rutina diaria y una vez la tengas ya instalada en tu apartamento, te podrás mudar e ir haciendo lo demás con organización y más responsabilidad. Muchas tiendas de muebles, electrodomésticos y decoración cuentan con facilidades de pago a plazos e inclusive te permiten hacer una compra para entrega futura, dejando el pedido en una bodega por un período definido, sin costo adicional. Tómate el tiempo para visitarlas e ir cotizando todo lo que vas a necesitar.

 

  1. No tener en cuenta el potencial de venta a futuro.

En principio, una primera vivienda va a ser vista como un hogar y la posibilidad de venderla es prácticamente nula, porque la estás comprando para que sea tu vivienda habitual, sobre todo a largo plazo, por lo que la única forma de venderla es para comprarte algo más. Sin embargo, nunca se debe dejar a un lado que los casos fortuitos pueden ocurrir o que las circunstancias económicas cambien, para bien o para mal.

Si se presenta una urgencia o algo que por cambios laborales te tengas que mudar, es importante comprobar si la vivienda se vendería a un precio justo y rápido, no solo para recuperar la inversión sino, ganar un extra por ello.

Ser propietario de un apartamento puede ser personal y financieramente rentable. Lo importante es tener todas las herramientas para hacerlo de manera conveniente y si puedes evitar cometer estos errores a la hora de comprar tu primera vivienda, vas a estar en condiciones mucho mejores que la mayoría de los compradores, incluyendo los ya experimentados.